DESCRIPCIÓN

Un hermoso pastel muy fácil de preparar. Su sabor achocolatado respeta las notas de vainilla, ofreciendo una irresistible combinación. Perfecto para acompañar con café con leche (¡un desayuno ideal!) o como postre o merienda.

INSTRUCCIONES

1. Precalentar el horno a 180 °C (350 °F). Engrasar un molde para pan de 22 x 12 cm (9 x 5 in).
2. En un recipiente mediano, mezclar la harina, polvo para hornear y sal. Reservar.
3. En un recipiente grande batir el aceite (o mantequilla) con el azúcar. Agregar los huevos y batir hasta incorporar. Verter la esencia de vainilla y mezclar.
4. A la mezcla anterior, agregar la mitad de los ingredientes secos del paso 1 y mezclar suavemente. Verter toda la leche y seguir revolviendo. Finalmente añadir el resto de la harina e incorporar todo, sin batir demasiado.
5. Dividir la mezcla en dos partes. En una de ellas, incorporar de manera envolvente el chocolate derretido.
6. Repartir alternadamente las dos mezclas (a cucharadas, usando una cuchara para cada mezcla) en el molde para hornear. Personalmente me gusta repartir las dos mezclas de manera aleatoria, pero también se pueden acomodar de manera similar a un tablero de ajedrez, en varias capas, alternando colores. El resultado, en cualquiera de los casos es hermoso. Cuando se terminen de verter las dos mezclas, hundir un cuchillo afilado hasta el fondo del molde (en uno de los bordes) y trazar un zig zag a lo largo de todo el pastel. Aquí evitar mezclar demasiado con el cuchillo, para que no se vuelva toda la mezcla demasiado chocolatosa.
7. Hornear por 35 - 45 minutos o hasta que un tenedor insertado en el centro del pastel salga limpio. Dejar enfriar en el molde 10 minutos antes de desmoldar. ¡A disfrutar!